Juicio por el crimen de Alan Bravo en La Tablada: en la jornada inicial de las audiencias, que a su vez será la única de debate hasta la sentencia de la semana próxima, el fiscal Carlos Luppino pidió la prisión perpetua para el joven acusado de haberle disparado al muchacho, al que quisieron robarle el auto y no se lo pudieron llevar porque no supieron ponerlo en marcha.
El planteo del funcionario fue realizado ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 3 de La Matanza y recayó sobre uno de los imputados por el hecho, Daniel ‘Dani’ Mareco (25), quien se encuentra detenido desde poco después del asesinato acusado por el delito de homicidio criminis causa. El otro sindicado como autor era menor al momento del ataque (L.R.) y ya fue condenado por un juez de Minoridad de ese Departamento Judicial.
En la jornada que concluyó con los alegatos declararon tres testigos que fueron clave en la investigación. Uno de ellos, un vecino que observó el momento del forcejeo previo a la secuencia que terminó con el disparo en el pecho de Bravo. Otro que reconoció a Mareco en la sala de debate y la tercera fue una mujer, también habitante de la zona, que reconoció al asesino por varias cámaras de seguridad y luego, insólitamente, recibió una solicitud de amistad desde la cárcel enviada por el acusado.
“Todo indica que fue asesorado en el penal en el que se encuentra detenido para que, con el celular que tiene autorizado, le haga saber a la testigo que sabía quién era a modo intimidatorio”, indicó una fuente de la investigación. Pese al mensaje que recibió, la vecina se presentó ante el tribunal y brindó su versión del crimen.
En el debate también se ventiló cómo fue la investigación policial que llegó hasta Mareco, quien fuera arrestado en Ciudad Oculta, en territorio porteño, con la misma bermuda e idénticas zapatillas a las usadas en el crimen. En el arresto le incautaron un arma calibre .9 milímetros que se determinó pericialmente fue la usada para matar a Alan.
Y un dato ilustrativo del juicio, al que el imputado asistió de manera presencial pero se negó en todo momento a declarar, al igual que durante la instrucción: en su perfil de Facebook, desde donde le envío la solicitud a la testigo, aparece con una remera del club Nueva Chicago, del cual es hincha. Mientras se mostraba la captura, Mareco se subió el cierre de la campera hasta el cuello y se tapó la camiseta de su club que llevó al tribunal.
El pedido de perpetua para Mareco y la declaración de reincidencia, es decir, que no podrá acceder a ningún tipo de beneficio, se sustenta en que el acusado tenía condenas anteriores por robo y por el uso de arma de fuego. El abogado de la familia Bravo, Daniel Campos, adhirió al planteo del fiscal Luppino, mientras que el defensor del imputado pidió que se lo condene por un delito menor en cuando a la expectativa de pena, que es homicidio en ocasión de robo, cuyo monto es de 8 a 25 años.
La semana que viene se conocerá la sentencia.
