Un análisis estadístico realizado desde el Observatorio de Adicciones y Consumos Problemáticos de la Defensoría del Pueblo bonaerense arrojó resultados alarmantes que vinculan de manera estrecha el consumo de sustancias psicoactivas como el alcohol o las drogas con los siniestros viales protagonizados por jóvenes.
En la Argentina, los hechos de tránsito (mal llamados, en su mayoría, como accidentes) son una de las dos principales causas de fallecimientos de jóvenes de entre 15 y 34 años. Por día, en nuestro país, muere un promedio de cuatro personas de ese rango etario.
Sólo en la provincia de Buenos Aires, al año fallecen más de 260 hombres y mujeres de esa edad. “La siniestralidad se encuentra entre las principales causas de defunción juvenil en la Provincia”, aseguró Walter Martello, defensor del Pueblo Adjunto y responsable de la recopilación de los datos.
La vinculación entre la siniestralidad vial y el consumo de sustancias psicoactivas es directa: al menos tres de cada diez conductores (28%) siniestrados y que reciben atención en las guardias de los hospitales consumió alguna sustancia en las horas previas al impacto, en tanto que el 25,1% reconoce haber consumido alcohol en las horas previas. El 3% blanquea consumo de marihuana y el 2% de cocaína.
Asimismo, existe aún una baja percepción del riesgo respecto al consumo de alcohol: uno de cada dos jóvenes ve menos riesgoso consumir alcohol que estupefacientes. El alcohol es la sustancia psicoactiva más presente entre las y los jóvenes y el inicio se da a edades cada vez más tempranas en la provincia de Buenos Aires.
Estas conclusiones surgen del entrecruzamiento realizado por la Defensoría que abarcó indicadores oficiales existentes en bases de datos de distintos organismos -Ministerio de Salud de la Nación y la Agencia Nacional de Seguridad Vial- y los relevamientos sobre consumo de sustancias que viene realizado el Observatorio de Adicciones desde hace cuatro años.
“Los resultados son por demás elocuentes y muestran que debemos adoptar un nuevo paradigma en las políticas públicas para combatir y prevenir el consumo de sustancias psicoactivas por parte de jóvenes conductores y acompañantes”, agregó Martello.
Mientras a nivel nacional se busca aprobar en el Congreso la ley de Alcohol Cero al Volante, legisladores provinciales de distintos sectores políticos dieron forma y presentaron un proyecto en la Legislatura bonaerense -elaborado en forma conjunta con el Observatorio- para crear un programa de educación integral obligatorio sobre adicciones que atraviese todas los niveles y modalidades del sistema educativo de gestión pública y privada en la Provincia.