Es un verdadero misterio saber en dónde está Ludmila Priscila Valenzuela. ¿Se fue por voluntad propia? ¿Decidió dejar su vida familiar de lado y arrancar de cero con alguien a quien conoció hace unos días a través de un juego virtual? ¿Está siendo víctima de privación de la libertad? ¿Fue captada por una red de trata de personas?
Todas esas preguntas quedaron plasmadas en la charla que la tía de la joven, de 18 años, mantuvo vía telefónica con Primer Plano Online. La desesperación de no saber qué pasa con la chica es un denominador común de la entrevista. Su entorno siente, asimismo, que la Policía no la está buscando porque “como es mayor está capacitada para tomar sus decisiones”, según explicó Yohana.
El calvario y la incertidumbre arrancaron el lunes pasado. Ludmila llevó a su hermanito al jardín en la localidad en la que viven, Rafael Castillo, La Matanza, como hacía habitualmente. Lo dejó y le mandó un mensaje a la mamá diciendo que se iba al cine al shopping de San Justo con el chico al que había conocido por las redes sociales y que supuestamente llegó a la Argentina hace una semana desde Perú.
“Lo único que nos respondió desde entonces son mensajes diciendo ‘estoy bien’. Nosotros creemos que ella no está decidiendo por sí misma y que la tiene engañada. Es más: no sabemos dónde está y últimamente no nos responde los mensajes”, agregó Yohana. Hay otro elemento que le agrega inquietud al tema: la identidad en redes sociales del sujeto no es su nombre real. Se presenta allí como Dilan Guasaco Guasaco, aunque en rigor es Dylan Sobuco, de 25 años.
“Intentamos contactar a la familia de él y tampoco pudimos. Es la primera vez que mi sobrina se va a sí. Nunca nos pasó algo así, estamos desesperados”, acotó la tía. Ludmila está en el último año de la Secundaria y tiene su grupo de pertenencia con amistades consolidadas de hace tiempo. Según la describe su familia es de contextura física robusta, tez trigueña, usa el pelo largo teñido a rojizo, mide 1,60 y ojos marrones. No se hizo tatuajes, no porta pulseras, cadenas ni piercing.
Ante cualquier información que pueda ser aportada la comunicación urgente, con los datos de la chica buscada, debe ser aportada al 911.