Un procedimiento policial a cargo de cinco efectivos de la DDI de Junín fue llevado adelante con un error que pudo haber sido fatal: se equivocaron de vivienda e ingresaron por la fuerza en una casa habitada por una mujer de 73 años que es paciente oncológica y, además, se está recuperando de un accidente cerebro vascular (acv). Ocurrió en pleno centro de Morón y la familia ya radicó la respectiva denuncia para que se investigue el accionar del personal involucrado.
“Eran las 6 de la mañana y me empezaron a llegar mensajes al celular a mí y a mi hermano directamente lo llamó mi madre: había tres tipos adentro de la casa después de haber roto la puerta de acceso al patio y la de la cocina. Ella no entendía nada de lo que pasaba”, le contó a Primer Plano Adrián, uno de los hijos de la víctima.
Tanto él como su hermano salieron raudamente hacia la casa de su mamá para interiorizarse de lo que pasaba y, al llegar, se encontraron con una insólita situación: cinco efectivos policiales pertenecientes a la DDI de Junín pidiendo que se tranquilicen. ¿Motivo? “Nos dijeron que habían cometido un error: tenían que allanar la casa de al lado”, explicó el muchacho. A todo esto, la mujer con una crisis de nervios y a la espera de una ambulancia para que la asista.
“Cuando vos leías la orden de allanamiento decía una dirección cercana, no la de mi madre. Nadie se molestó en constatar el lugar, directamente llegaron y rompieron todo. Después se fueron y nos dejaron con mi mamá en crisis y la casa toda rota. Empezar a llamar al cerrajero, a herrero, a los médicos… No puedo creer que hayan hecho semejante desastre”, completó Adrián.
LA RECONSTRUCCIÓN DE LA CASA
Tuvieron que reconstruir dos puertas, una reja y, principalmente, contener a la mujer, que vive sola desde que enviudó, con la compañía de su perro. Sus hijos están continuamente acompañándola, pero ella tiene su independencia y en una persona mayor todo el mundo sabe lo que eso implica. Durante el día fue medicada con calmantes. Dejar la casa de toda su vida, ubicada en la zona de Tribunales de Morón, a 6 cuadras de la plaza central del distrito y de la comisaría 1ª, para ella no es una opción (no se precisan más datos para proteger a la víctima).
La comitiva policial llegó en dos vehículos no identificables. Estacionaron en la puerta, treparon una reja, tomaron el ariete (el fierro con el cual rompen las puertas a golpes) y se posicionaron: dos de ellos armados y los otros ingresaron. “Tenían entre los papeles que nos mostraron una foto de Google Street View. No se puede creer lo poco profesionales que fueron”, se quejó el vecino.
La cuadra está mal iluminada. Hubo reclamos vecinales y permanece oscura. Incluso fueron los propios vecinos los que a veces cambian los focos de la luz de la calle para tener algo más de claridad. Eso, considera Adrián, conspiró contra el procedimiento policial, que fue solicitado por la Fiscalía Nº 4 del Departamento Judicial de Junín en una causa por robo agravado en la cual buscaban a un imputado con domicilio en Morón, pero no en la casa de la abuela.
La familia de la mujer ya presentó la correspondiente denuncia judicial a través de su abogado, Yamil Castro Bianchi, para que se investigue lo sucedido. Y la pregunta de fondo que se hacen sus hijos es: ¿quién se hace cargo de lo que pasó y de lo que podría haber pasado? Una inquietud sin respuesta, porque ni siquiera recibieron las disculpas del caso de parte del personal policial interviniente.