La oficial de la Policía Local de Morón Natalia Elizabeth Fernández, de 26 años, y su bebé en gestación de tan sólo seis meses de embarazo, murieron hoy por causas que la justicia intenta establecer. El escenario fue una vivienda familiar ubicada en Perdriel 827, de El Palomar.
El concubino de la mujer y padre de la criatura, Maximiliano Fantino, de 31 años, era integrante de la Policía Local de Esteban Echeverría, y se encuentra cumpliendo arresto domiciliario desde el 30 de abril de 2016 por un homicidio cometido en un enfrentamiento armado.
Si bien la información inicial –según la declaración del hombre- hablaba de que la mujer se hallaba en su habitación manipulando el arma reglamentaria y se efectuó accidentalmente un disparo en el tórax, la UFI 11 de Morón, especializada en violencia familiar y de género, puso al frente de la pesquisa a la Gendarmería Nacional Argentina para determinar qué ocurrió. Testigos afirmaron haber escuchado discusiones previas al sonido del balazo y no descartan que se trate de un femicidio.
La efectiva policial fue trasladada de urgencia al Hospital Posadas pero murió a poco de llegar, y los médicos tampoco pudieron salvar al bebé, al que internaron en neonatología pero no resistió.
La pareja tenía otra hija, Nicol Fantino, de un año. El arma de donde salió la bala está en manos de la justicia para realizar las pericias correspondientes.