Sin solución de continuidad y con un permanente lugar para la sorpresa, el Hospital Posadas fue, la semana pasada, uno de los tópicos con mayores búsquedas en la Argentina en la web. Es que, en verdad, muchos pacientes y usuarios quisieron intentar entender la gravedad del conflicto que atraviesa el nosocomio más grande del país, que está echando con un goteo interminable a profesionales de diversas áreas, lo que deja completamente desmantelados servicios esenciales.
La decisión de las autoridades, además de quitarle atención a los pacientes, también les resta calidad a las prestaciones. Pero también provocó una fuerte reacción de los profesionales médicos, que no están vinculados a ningún sindicato, pero salieron a frenar el despido de trabajadores de sus equipos. “Efectivamente pasó, pero tuve la oportunidad de charlar con las autoridades del hospital y fueron reincorporados en el momento. Eso es lo que arreglamos. Espero que no haya inconvenientes con esto”, confirmó a Primer Plano Online el doctor Serio Pampin, jefe de la Unidad de Neurocirugía Funcional. Se trata, ni más ni menos, que del equipo médico que realiza intervenciones paliativas del Parkinson, una experiencia única en Latinoamérica en la salud pública. Le habían echado a dos compañeros de grupo y, luego de su intervención, los responsables del hospital dieron marcha atrás.
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La crisis en el Posadas se desató la semana anterior con la renuncia del responsable del área de Cirugía Cardiovascular Infantil, Christian Kreutzer, un hombre que además de ser una eminencia en medicina es un ferviente militante de Cambiemos. Quizá por eso su salida hizo tanto ruido. Todos sus dardos apuntaron a Juan Ignacio Leonardi, el joven director de Recursos Humanos del nosocomio, a quien le atribuyen una frase caliente en medio de los debates que hubo en los últimos días.
“Cuando fue a renunciar el jefe de Cirugía Cardiovascular Infantil, el director de Recursos Humanos del establecimiento, Juan Ignacio Leonardi, les respondió que renuncien todos los que quieran total tenía cientos de médicos latinoamericanos que estaban dispuestos a trabajar como monotributistas”, le atribuyen diversos interlocutores que escucharon sus gritos en la mañana del miércoles. Leonardi no tiene diálogo con los gremios y es el encargado de firmar todos y cada uno de los enchastrados telegramas de despido a los médicos, enfermeros y trabajadores de distintas áreas a los que echa del nosocomio. Lo hace con falacias, y pretendiendo conducir un hospital público como si fuera una empresa. El argumento: el no cumplimiento de horarios.

En el medio, versiones que indican que hubo 500 reprogramaciones de operaciones que estaban previstas desde hacía tiempo y el vaciamiento de programas ya afecta el funcionamiento diario del hospital. Por caso, el único cirujano de columna que quedaba fue echado. Lo mismo para el que realizaba un estudio auditivo para tratar el vértigo, a la única pediatra que hacía estudios funcionales en gastroentorología, y a los tres especialistas en atención a pacientes con síndrome de down.
Pero Primer Plano Online también detectó un video publicado en la propia página del hospital en el que Christian Kreutzer, el cirujano cardiovascular infantil que desató la hecatombe con su renuncia, se desmiente a sí mismo. “En los últimos diez años hicimos más de mil procedimientos quirúrgicos en niños con cardiopatías congénitas, la vasta mayoría de ellos sin cobertura social. Es un número importante pero obviamente queremos hacer más”, decía en aquel momento el reconocido médico, que en la semana le pidió silencio a dirigentes kirchneristas que salieron a denunciar lo que estaba ocurriendo en el hospital.
“Porque del 2011 al 2015 no pude operar por falta de insumos. Mientras ustedes pagaban actos partidarios con la plata del Hospital. No, @Sabbatella? Haganse un favor, y cállense”, le respondió al exintendente de Morón Martín Sabbatella el pasado miércoles el cirujano. Sin embargo, en el video de marzo hablaba de las más de mil operaciones realizadas en la última década. Algo no cierra en medio de la discusión. O sí: los únicos perjudicados son los pacientes, mientras la salud pública se desangra.
https://twitter.com/maxplus92/status/1040053722703978496