La presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, visitó el barrio Carlos Gardel, en Morón, para recorrer la biblioteca popular ‘Yo Soy Gardel’, que es parte de un proyecto comunitario que comenzó en septiembre 2016 de manera itinerante y, desde abril de 2017, funciona en un espacio prestado por una familia del barrio. El lugar tiene actualmente más de 2000 títulos y cuenta con cerca de 300 socios.
Después de la visita, la histórica dirigente de los derechos humanos brindó una charla bajo la llovizna frente a chicos y grandes que se acercaron a escucharla. Luego de una serie de rapeos de pibes del barrio, se dirigió a quienes la escucharon con un discurso emotivo. “Lo único que le puedo pedir es perdón. Mis hijos dieron la vida para que esto no pasara, y dieron la vida para que todos vivamos mejor. Y dieron la vida muchos años: primero cuando lucharon y luego cuando se los llevaron. Sólo les puedo pedir perdón por no haber podido llegar a consolidar lo que ellos soñaron”, expresó.
Posteriormente, Bonafini arengó a sus interlocutores, a quienes les dijo “tenemos esa obligación, ese deber de llegar a consolidar lo que ellos quisieron: que los que menos tienen tengan lo que les corresponda, que no es ningún regalo, sólo es un derecho: el trabajo, la salud, el techo”. Y remató: “Yo entre un milico preso y un niño feliz y que coma elijo un niño feliz y que coma. A mí el milico preso no me da nada, no me va a devolver a mis hijos. Pero sí un niño feliz va a hacer una patria feliz”.