En febrero comenzó el tironeo. Una trabajadora del PAMI de Ituzaingó denunció por malos tratos al director de la agencia distrital, Fabián Montenegro y, desde entonces, hubo una catarata de reclamos en contra del funcionario.
Los gremios tomaron cartas en el asunto y elevaron una queja al director ejecutivo de la regional Morón, Rodolfo Bentaverri, pero tampoco lograron la respuesta esperada. Y así se llega a la situación de hoy día, donde el diálogo parece roto y la relación no tener vuelta atrás.
“Es un hombre que tiene conductas misóginas y creemos que la relación va a ser muy difícil de recomponer”, puntualizó Marcela Pantoja, delegada normalizadora de UPCN de PAMI Morón, quien visitó los estudios del programa periodístico Primer Plano Recargado en representación de sus compañeros de la Agencia Ituzaingó. “Hay gritos, malos tratos, violencia laboral y acoso permanente principalmente con las mujeres”, agregó.
Por su parte Mercedes Scioli, delegada de ATE en la obra social, manifestó que Montenegro “no modifica su actitud” pese a la intervención de sus superiores. “Es la primera vez que sucede algo así”, explicó la gremialista, quien diferenció al denunciado de su antecesor, Gabriel Pozzuto, actual concejal de Cambiemos en Ituzaingó y precandidato a la intendencia. En rigor, Pozzuto es el jefe político de Montenegro, y fue quien lo colocó en ese lugar al frente de la agencia.
La semana pasada, los trabajadores del PAMI Ituzaingó realizaron un cese de actividades para dar a conocer su reclamo y enfrentar a “una jefatura maltratadora, machista y prepotente”. Sin embargo, no consiguieron hasta el momento respuestas de las escalas superiores. Lo único que se sabe es que Montenegro está de vacaciones esta semana y que se reintegrará a sus labores el próximo jueves 2 de mayo, si es que no se produce ningún cambio antes.
LA DEFENSA DE MONTENEGRO
Desde algún lugar de la Patagonia, donde se encuentra de descanso por unos días, Fabián Montenegro atribuyó a una movida política en su contra las denuncias. Entre otras cosas, desmintió haber mostrado el recibo de sueldo de los empleados de la agencia ante jubilados que fueron a esa dependencia a reclamar por la falta de insumos y prestaciones justo en el día en que se llevó adelante la medida de fuerza.
“Hay límites en los reclamos y en las formas de expresarlos. Que se pongan de acuerdo tres sindicatos no representa una verdad absoluta”, fue el descargo realizado en una conversación telefónica con el programa periodístico. “A pesar de cualquier cosa, yo tengo las puertas abiertas para conversar las necesidades y los problemas de cada trabajador”, cerró.
