La presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, fue la principal figura de un acto de desagravio que realizó Unidad Ciudadana de Morón en torno a la figura del expresidente Néstor Kirchner, cuyo busto fue retirado el viernes pasado de la Plaza San Martín tras la promulgación exprés que el intendente Ramiro Tagliaferro ejecutó de la ordenanza votada un día antes por el Concejo Deliberante.
El breve acto consistió en la colocación de un pañuelo blanco, símbolo de la organización de Derechos Humanos, en el lugar donde estaba el monolito de quien condujera los destinos de la Argentina entre 2003 y 2007. Al lado de ese espacio ahora vacío quedaron las esculturas de Perón y Evita. «Tanto nos dio Néstor, tanto le debemos. En cada cosa que hacen contra él abren miles de corazones», dijo Bonafini. En el pañuelo que dejaron colocado allí, atado a dos cañas, puede leerse la leyenda “en defensa de la democracia ¡Ni un paso atrás!”
«A Néstor el pueblo no lo va a olvidar nunca. Por más que tiren, la gente lo ama, lo quiere y lo reconoce», continuó la dirigente social, que estuvo acompañada por concejales de Unidad Ciudadana de Morón como Florencia De Luca y Hernán Sabbatella, y militantes de Nuevo Encuentro.