El crimen de Marcela Rota, la mujer asesinada de un disparo en el tórax el pasado 10 de junio en Ciudadela, sigue siendo un verdadero misterio para la justicia. Si bien la instrucción por el hecho continúa, con la búsqueda de pistas que lleven a dar con el autor del disparo mortal, una investigación paralela llevó a la cárcel al exmarido de la víctima.
Según logró confirmar Primer Plano Online con fuentes judiciales, el Juzgado de Garantías Nº 2 de San Martín dictó la prisión preventiva para Santiago Nicolini. A pedido del fiscal Ignacio Correa, de la UFI Nº 5 de ese Departamento Judicial, el juez Carlos Mariano González dispuso que el sujeto continúe privado de su libertad.
¿Cuál es la imputación en su contra? Son dos hechos, en rigor. Por un lado, es acusado del delito de amenazas coactivas agravadas por el uso de arma de fuego y, por el otro, desobediencia, es decir, haber incumplido una restricción perimetral de acercamiento. Como ambos casos son en concurso real entre sí y por la expectativa de pena no admiten la excarcelación, se confirmó su arresto.
Hay otras dos determinaciones judiciales vinculadas al expediente. Por un lado se declararon prescriptos dos hechos: el primero, de septiembre de 2015, en donde Nicolini estaba imputado por lesiones leves y amenaza simple; por el otro, lo ocurrido en 2017, que fue caratulado como lesiones leves agravadas por el vínculo y amenazas coactivas.
Pero como tanto las causas que se declaran prescriptas (es decir, que ya no debe pagar por ambos casos) como las que tomó la justicia para dictar la preventiva ocurrieron en Ituzaingó, donde antes vivía el matrimonio Nicolini-Rota, la justicia de San Martín declinó competencia y giró las actuaciones al Departamento Judicial Morón. Si Morón no acepta el caso, entonces será un estamento superior el que deba resolver quién sigue la causa.
En paralelo, por el crimen “no hay personas identificadas” como posibles autores. Lo que está claro es que el exmarido de Rota no tiene vinculaciones por el momento con el hecho, y que el motivo por el cual está preso es otro, como se describió más arriba. Asimismo, a través de su defensa, apeló la decisión, que ya está siendo revisada por la Cámara.
El asesinato de la mujer se descubrió luego de que el auto que conducía chocara contra el paredón de una casa sobre la calle Rafaela, metros después de Díaz Vélez, avenida que divide las localidades de Ramos Mejía y Ciudadela. La mujer fue trasladada al hospital Carrillo, a donde llegó sin vida. Había salido con su auto, un Volkswagen Bora gris, a realizar compras, y dejó a su hija en la casa de sus padres para que la cuiden hasta su regreso, cosa que nunca pasó porque antes un tiro le quitó la vida.
