Una simple revisión por la red social Facebook le permitió a Primer Plano On Line descubrir un hecho verdaderamente indignante. Sandro Fabián Fernández, el asesino del camionero Facundo Barreto en William Morris, está preso en Olmos y desde allí postea fotos y conversa con amigos y contactos para contar cuál es su condición.
Pero lo que más reacción negativa provoca es que a través de la red social Facebook intercambia comentarios con personas que deberían haberse presentado a testimoniar en la causa y jamás lo hicieron. Tal es el caso de Gaetano Domingo Aguirre, quien el domingo pasado a las 19.20 le escribió: “Hola loco, estoy esperando q me avisen X siempre llegan tarde y no se habla de nada”, a lo que Fernández respondió, textual: “A mí me digieron (sic) que te dieron día hora y nunca te presentaste amigo. 3 bese (veces) te dieron ya”.
El mencionado Gaetano es un testigo presencial de los hechos, que en rigor nunca se presentó a declarar en el marco de la investigación. “Estamos sorprendidos por esta situación. El testigo nunca se presentó y hace públicos esos posteos que nos llenan de asombro”, señaló hace instantes a Primer Plano On Line Yamil Castro Bianchi, el abogado de la familia Barreto.
Sandro Fabián Fernández está detenido desde el 17 de noviembre del año pasado, cuando fue apresado en Uruguay, su país de origen, luego de haberse fugado tras el asesinato del camionero Facundo Barreto en Hurlingham.
El fiscal Matías Rapazzo pidió la prisión preventiva por considerarlo culpable del crimen, y llegará preso al juicio según dispuso el juez Jorge Rodríguez. Los investigadores consideran que está acreditado con su investigación que el detenido es el autor material de los disparos que le dieron muerte a la víctima.
Entre los aspectos más importantes de su declaración testimonial en sede judicial una vez extraditado, Fernández aceptó que participó de una discusión de tránsito con Barreto y otras personas, admitió que se trenzó en lucha con la víctima y que en un momento escuchó que salieron dos tiros. También dijo que el arma homicida no era de él sino del camionero muerto. En lo estrictamente procesal se defendió y no se responsabilizó del crimen.
