El peor final: murió Thiago Correa, el nene de 7 años que recibió un disparo en la cabeza mientras esperaba el colectivo con su papá en Ciudad Evita, partido de La Matanza. Lo confirmaron hace instantes entre sollozos papá y mamá del chiquito en las puertas del Hospital del Niño de San Justo, donde estaba internado desde ayer.
“Tuvimos el fallecimiento de Thiago. Es muy doloroso. Pedimos justicia y respeto para la familia”, alcanzó a decir el padre del menor con su voz entrecortada y apenas las fuerzas que le quedaban para enfrentar a los medios de comunicación apostados en el nosocomio. Desde el mediodía los datos que trascendían sobre el estado de salud del chico eran muy poco alentadores.
En medio de escenas desgarradoras, el efectivo policial que disparó 11 balazos para evitar que lo asalten cuatro delincuentes fue defendido por la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich. “Los responsables directos de la situación que atraviesa Thiago Benjamín Correa Medina son los delincuentes. Uno de ellos murió en la legítima defensa que realizó Facundo Aguilar Fajardo en el cumplimiento de su deber como policía federal”, manifestó la funcionaria.
El impactante video de la balacera
Se conoció hoy el video del intento de robo que sufrió el efectivo de la Policía Federal en Ciudad Evita en el que resultó baleado Thiago, un delincuente fue abatido y otros dos heridos y detenidos.
Fuentes de la investigación confirmaron a Primer Plano Online que el juez de Garantías Rubén Ochipinti convalidó la detención del uniformado solicitada por el fiscal de Homicidios Diego Rulli, quien le imputa al oficial ayudante Facundo Daniel Aguilar Fajardo (21) un exceso en la legítima defensa.
El video de cómo el policía disparó contra los delincuentes y baleó a Thiago Correa en La Matanzahttps://t.co/tcMZutphKQ pic.twitter.com/duUYeZgmd8
— Primer Plano (@primerplanotv) June 6, 2025
El hecho ocurrió en la intersección de avenida Crovara y Madrid en la mencionada localidad de La Matanza, cuando el policía fue abordado por cuatro sujetos quienes, a punta de pistola, le exigieron la entrega de sus pertenencias. El tema es que el arma que le exhibieron era de juguete, no apta para el disparo, y la víctima disparó 11 balazos cuando los atacantes corrían para escapar sin concretar el robo.
De los cuatro agresores, uno resultó herido en una pierna, otro en el abdomen y un tercero fallecido a los pocos metros. Pero lo más impactante fue que un menor que también aguardaba el transporte público en la otra cuadra junto a su papá fue alcanzado por un proyectil en el cráneo.