Durante la exposición del jefe de Gabinete de Nación, Guillermo Francos, ante el Congreso hubo una frase en particular que se distinguió del resto de lo que fue su análisis sobre el rumbo de la gestión de gobierno. Fue un elogio, algo muy poco común en la política libertaria, hacia una institución pública.
En rigor, el ministro coordinador utilizó el ejemplo de la Universidad de La Matanza para ponderar la transparencia en la administración de fondos estatales. “Rindió cuentas por el 100% de sus gastos”, enfatizó en torno a la UNLaM, y la diferenció de otras entidades académicas similares, que no hicieron lo propio según reveló.
“La Universidad de Buenos Aires (UBA) desde el año 2015 no rindió fondos por el 80% de los recursos públicos utilizados. Desde el año 2015 hasta el 2024, no se pueden realizar auditorías porque no se mandó la rendición de fondos. Así como hay otras universidades, como la Universidad de La Matanza, que rindió el 100% de los fondos enviados, hay otras universidades, el caso más prototípico es el de La Rioja, que no rindió sobre el 87% de los fondos enviados”, fue la comparación de Francos.
Consultado por Primer Plano Online, el rector de la UNLaM, Daniel Martínez, reflexionó: “nosotros tratamos de cumplir con los tiempos que establece la ley para las remisiones de cuentas para que pueda someterse a las auditorías correspondientes y comprobar si el gasto que se hizo se ajustaba a la normativa vigente y si era necesario”.
El responsable de la casa de altos estudios, que desde hace 24 años conduce la institución, subrayó que “siempre tratamos de tener un ordenamiento administrativo acorde, porque si uno cumple bien con eso después puede solicitar más refuerzos para una determinada partida”. “Nosotros podemos justificar cualquier pedido que hacemos, siempre con finalidades educativas”, completó.