Cristofer Bascoff nació el 7 de marzo de 2019 en la localidad de Belén de Escobar con un síndrome conocido como de intestino corto. A los pocos días padeció lo que se conoce como enterocolitis necrotizante con intestino perforado. Fue derivado, con riesgo de vida, el 3 de abril del año pasado hacia el hospital Sor María Ludovica, de La Plata, en donde permaneció un año internado.
En ese lapso atravesó siete operaciones para reconstruir su intestino. “Casi se me muere, pero tiene un corazón que es una piedra y resistió”, le cuenta Steven, papá del chiquito, a Primer Plano Online. Después de semejante batalla, y cuando el cuadro del niño estaba estabilizado y empezaban a pensar en la internación domiciliaria, él pidió que lo trasladen a un centro asistencial no tan lejano a su domicilio para poder estar también con su otra hija, de dos años y medio. Y ahí volvieron los problemas.
Su obra social, IOMA, que Cristofer la tiene por su discapacidad, lo derivó a la Clínica Agüero, de Morón. “La falta de profesionales como gastroenterólogos, nutricionistas, hepatólogos, entre otros, hizo que mi hijo en 15 días vuelva para atrás y hoy esté intubado. Por eso estoy rogando la derivación al Garrahan o a un hospital de alta complejidad en donde traten a mi hijo como tiene que ser, porque acá lo están dejando morir”, señala el papá del bebé.
EL CONMOVEDOR VIDEO DEL PAPÁ DE CRISTOPHER:
Según narra Steven, los médicos les dicen que esperen y que no se asombren su un día surge un sangrado que ellos no puedan frenar. A lo largo de las intervenciones que pasó Cristofer le fueron quitando parte del intestino que se le pudrió en su interior, y actualmente tiene 35 centímetros de intestino cuando debería contar con tres metros para se crecimiento y desarrollo. Sufre desnutrición crónica, porque su organismo no absorbe los nutrientes que necesita.
“Pero mi nene estaba bien. Llegó a esta clínica y lo único que hizo es ir para atrás”, agrega el papá, con tono desesperado. Se turna con su mujer para dormir uno en la habitación junto a su hijo y el otro en los pasillos de la institución. La esperanza para el pequeño es un trasplante multivisceral, de hígado, intestino y páncreas, por eso la necesidad de trasladarlo cuanto antes.
COMUNICADO OFICIAL DE LA CLÍNICA AGÜERO
Las autoridades del centro de salud respondieron a la requisitoria periodística de Primer Plano Online con un texto en el cual detallan la situación del chiquito. Este medio reproduce a continuación lo que informó la Clínica Agüero.
- Cristofer ingresó a nuestra clínica el último 20 de marzo, derivado por la obra social IOMA, y trasladado desde el Hospital Ludovica de La Plata, con un diagnóstico de prematurez, ARM prolongada en periodo neonatal e intestino corto secundario a resección quirúrgica por enterocolitis necrotizante en periodo neonatal, con antecedentes de múltiples cirugías abdominales que se le realizaron en el Hospital mencionado.
- Desde entonces, Cristofer permaneció en nuestra Unidad de Terapia Intensiva Pediátrica, recibiendo todos los cuidados necesarios, aunque lamentablemente estos no fueron suficientes, dado el complejo, delicado y frágil estado de salud con que Cristofer llegó a la clínica.
- Ante esta situación, nuestros directores médicos pediátricos realizaron un ateneo interdisciplinario con el Programa de Insuficiencia, Rehabilitación y Trasplante Intestinal del Hospital Universitario Fundación Favaloro, que se manifestó diciendo “consideramos que los tratamientos hasta aquí realizados por el grupo tratante son los indicados para su patología y que no tenemos ninguna alternativa diferente a lo que ellos están llevando a cabo, ni desde lo médico ni desde lo quirúrgico” y agrega “… la condición actual del paciente nos hace entender que la situación del niño es de alto riesgo de vida y condicionante de su imposibilidad de acceder al trasplante debido a la secuencia de complicaciones vinculadas a su evolución clínica asociada a la grave progresión de su enfermedad”.
- Asimismo, nuestro equipo se comunicó con la dirección del Hospital Garrahan, desde donde se recibió como respuesta que «dado el cuadro clínico del niño, no podemos aceptarlo».
- Por estas razones, Cristofer permanece aún internado en nuestra clínica, recibiendo en forma permanente tratamientos de alta complejidad y máxima atención.
- Desde el Instituto Médico Agüero, comprendemos y acompañamos la angustia y el dolor de los padres de Cristofer, y estamos haciendo todo lo posible por acompañar a nuestro paciente y a su familia en este difícil momento. Nuestro equipo de pediatría, especialmente, está dando todo de sí -y seguirá haciéndolo mientras sea necesario- para abordar una situación de gran complejidad como es el estado actual de Cristofer.
- Todas las respuestas recibidas de parte de IOMA, la Fundación Favaloro y del Hospital Garrahan acerca de la situación de Cristofer se encuentran a disposición de quien lo solicite .