A 9 años y medio de la noche que les cambió la vida para siempre, la familia del comerciante Diego Roda insiste con el pedido de justicia y una condena a prisión perpetua para Fernando Grané, el policía que disparó contra el auto en que viajaba la víctima junto a su mujer, Virginia Tueso, y el pequeño Pedro, nacido apenas 12 días antes.
“Quiero decirle algo dirigido a los jueces y a los jurados que van a intervenir en el juicio. Me gustaría que sepan y entiendan que nosotros, la familia Roda, pedimos justicia por dos personas: por mi papá y por Emanuel Correa, que también sufrió un atentado un año después del crimen de mi padre a manos de Fernando Grané. Les pido que intenten ponerse en nuestros zapatos y ver si ustedes aguantarían pasar nueve años sin ver justicia para la persona que más aman”, se sinceró Franco, hijo del hombre asesinado la noche del 12 de septiembre de 2016.
“Quiero que haya prisión perpetua hacia él para que mi familia pueda estar en paz. A mí se me puede derrumbar el mundo, se me puede prender fuego la casa, pero si mi familia tiene paz eso ya es más que suficiente. Pido que quienes deban juzgar el hecho ayuden con su voto para eso. No puedo permitir que mis abuelos se me mueran sin encontrar paz”, agregó el muchacho, visiblemente conmovido al hablar de su papá.
A su lado estaba su hermano Facundo, que casi no pudo emitir palabras en la entrevista con Adrián Noriega y Norman Díaz en la emisión semanal del programa periodístico Primer Plano por el canal Somos de Flow. En medio de ambos María del Carmen Peche, su abuela, mamá de su papá, y del otro lado de la pantalla el pequeño Pedro, de 8 años, el bebé que viajaba en el auto al que le dispararon los dos policías que perseguían a delincuentes y confundieron a Roda con uno de los ladrones.
Marcha de la familia Roda por justicia
El próximo sábado 10 de mayo la familia se volverá a manifestar en la esquina de Brandsen y Belén, en las puertas de la verdulería El Económico que Diego llevaba adelante. “Espero que sea la última vez que tengamos que molestar a la gente. Si es así será porque al fin conseguimos justicia”, afirmó la mamá de Roda. “Hasta ahora no hubo justicia, fue todo una mentira. Pedimos que el que asesinó a mi hijo tenga perpetua. Y que, cuando mi hijo salga del cementerio, que el asesino salga de la cárcel”, agregó la mujer.
Como informó Primer Plano Online, por este estremecedor caso ya hubo varias condenas, todas mediante el mecanismo de juicio abreviado. La última fue para el expolicía Gerardo San Miguel, quien quedó desvinculado formalmente del asesinato del verdulero y recibió la pena de seis años de prisión y doce de inhabilitación para ocupar cargos públicos.
El juez Carlos Roberto Torti, integrante del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 4 de Morón, dictó la sentencia en orden a los delitos de disparo de arma de fuego agravado por tratarse de un funcionario policial en el ejercicio abusivo de su función, y, falsedad ideológica de documento público. Lo que se comprobó en la instrucción es que esa bala del arma que gatilló San Miguel impactó en la carrocería del vehículo y no es una de las que mató al comerciante
En la pena impuesta a San Miguel también se tuvo en cuenta el relato de la viuda de la víctima, Virginia Tueso, quien declaró que luego de la balacera fue el propio uniformado el que se acercó hasta ella y le alcanzó un trapo para que se haga un torniquete en la herida que tenía en el antebrazo derecho para que deje de sangrar.
Las otras condenas por el crimen de Diego Roda
La primera condenada también por el mecanismo de juicio abreviado había sido la expolicía Camila Fernanda Pazos (33), quien recibió la pena de tres años de prisión de ejecución condicional e inhabilitación absoluta por seis años para ejercer cargos públicos. La acusaron de los delitos de falso testimonio, encubrimiento agravado por la condición de funcionaria publica y falsedad ideológica de instrumento público.
Las otras personas condenadas en el caso fueron el excomisario Daniel Fernando Pérez; el exintegrante de la Policía Local de ese distrito Maximiliano Gastón Ramos; y la pareja de civiles compuesta por Alejandro Tomás Salomón y Johana Belén Vukman.
A los funcionarios policiales les cupo la pena de la pena de tres años de prisión en suspenso e inhabilitación absoluta para ejercer cargos públicos por el doble de tiempo de la condena (es decir, seis años) en orden a los delitos de encubrimiento agravado por ser el autor funcionario público, falsedad ideológica de documento público y falso testimonio.
Por su parte, a Salomón y a Vukman la sanción impuesta por la justicia fue de dos años de prisión en suspenso e inhabilitación absoluta por el doble de tiempo para ser parte de procesos judiciales, en ambos caos por los delitos de encubrimiento agravado por tratarse del hecho precedente un delito especialmente grave, falsedad ideológica de instrumento público y falso testimonio agravado condena y pagar las costas del proceso.
Al trámite judicial, más allá del juicio por jurados que espera Grané, también le resta un debate técnico contra Sergio Fabián Barrientos, Maximiliano Duarte y el actual comisario Diego Carreira, que también enfrentan cargos por la falsificación de documentos públicos tras la muerte de Roda. Es decir, por haber llenado actas de manera apócrifa en torno a lo sucedido.
