Un grupo de dirigentes del PRO, entre los que destaca la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, firmó un comunicado en apoyo al Gobierno nacional en el marco del conflicto con la provincia de Chubut. En el texto, los firmantes rechazaron “la resistencia de muchos gobernadores a compartir el esfuerzo fiscal necesario para impedir una crisis hiperinflacionaria”.
Entre los nombres salientes que estamparon sus firmas están el del intendente de Tres de Febrero, Diego Valenzuela; las ex concejales de Morón Analía Zappulla; de Ituzaingó Silvina Valdevenito; y de Hurlingham Andrea Giorgini; y del dirigente moronense Martín Culatto. También pusieron el gancho Daniela Reich, senadora bonaerense y actual presidenta del Pro en el territorio provincial; las actuales concejales de Morón Marita Traverso, Cecilia Solía y Romina Fusco; y el edil de Merlo Pablo Cocuzza.
En el documento, que Primer Plano Online publica completo, quienes lo firmaron dan cuenta de la ruptura definitiva de Juntos por el Cambio y dejan en claro que están quienes van a una fusión definitiva con las ideas de La Libertad Avanza. “Deben renunciar a sus privilegios si queremos salir de la decadencia”, indicaron en sintonía con las palabras expresadas por el presidente Javier Milei.
Se refirieron se ese modo a “gobernadores feudales, barones del conurbano, oligarquías sindicales, gerentes de la pobreza”, entre otros. E hicieron referencia al conflicto que se abrió el viernes pasado entre el Gobierno nacional y el de la provincia de Chubut por el descuento en la coparticipación a raíz de una deuda que esa jurisdicción mantiene con la administración central.
Cabe señalar que el gobernador chubutense, Ignacio Torres, que llegó al poder de la mano de la alianza Juntos por el Cambio siendo un hombre perteneciente al Pro, amenazó con interrumpir desde el próximo miércoles la salida de petróleo y gas de la provincia si el Ministerio de Economía de la Nación “insiste con retener de manera indebida la mitad de la coparticipación” que le corresponde a su distrito.
“El esfuerzo de reducción del gasto fiscal que está obligado a ejecutar el Gobierno nacional debe ser rápido y profundo; y su esfuerzo debe ser acompañado por todas las provincias”, señalaron. Y profundizaron: “asistimos hoy consternados a la resistencia de muchos gobernadores a compartir el esfuerzo fiscal necesario para impedir una crisis hiperinflacionaria cuya víctima principal no sería el gobierno sino los argentinos que habitan todas las provincias”.

Entre otras cosas, llamaron a “discutir un nuevo marco para la coparticipación y la distribución de los recursos federales”. “El PRO no puede avalar ningún ataque a la propiedad ni dejar sin energía al país”, aseveraron, y marcaron que “así se ahuyentan inversiones, se impide la creación de empleo y se hace imposible el progreso”.
El comunicado realizó también una autocrítica al gobierno de Cambiemos (2015-2019), en donde remarcaron que en su momento “se avanzó demasiado lentamente y con exagerada prudencia, y eso se pagó con una crisis que impidió la continuidad del cambio”.
“En caso de volver a ser gobierno, nos comprometimos durante la campaña a hacerlo con mayor coraje y decisión. Nuestros votantes han compartido esta mirada, apoyando en las PASO esta propuesta y a los dirigentes que mejor la expresaban, y apoyando masivamente, en el ballotage, a Javier Milei y al cambio que encarna para la mayoría de los votantes argentinos”, enfatizaron.
Y remataron redoblando la apuesta en apoyo al gobierno nacional. “Tenemos la certeza de que la Argentina ha empezado un camino que debe ser irreversible: el camino hacia un país opuesto al que hemos sufrido. Creemos que es hora de trabajar incansablemente por los problemas reales de la sociedad, postergando los intereses sectoriales de los dirigentes políticos, sindicales y empresariales, y priorizando el de todos”.
