Un llamado al 911 alertó sobre el hallazgo del cuerpo de un hombre descuartizado y en bolsas a la vera del arroyo del Rey en la localidad de Ingeniero Budge, partido de Lomas de Zamora. Esa comunicación dio inicio a una investigación que concluyó con la confirmación de que se trataba de los restos de Fernando Alejandro Pérez Algaba (41), apodado ‘Lechuga’, un empresario de la región oeste que en los últimos años se había radicado en Barcelona.
La víctima del atroz crimen había llegado a la Argentina y se radicó en un departamento de la calle Olazábal al 1000, en pleno centro de Ituzaingó, y fue la martillera que le alquiló la propiedad, Vanesa Romera, quien advirtió sobre su ausencia. “Debía devolver la llave el pasado 19 de julio, pero no logró encontrarlo, por eso radicó la denuncia, precisó una fuente de la investigación. Esa presentación dio origen a la causa por averiguación de paradero en la Fiscalía Descentralizada Nº 1 de Ituzaingó.
Finalmente, con los restos encontrados en el arroyo, la Policía logró determinar que los restos diseccionados eran de Pérez Algaba. Lo que hallaron fueron las piernas y los brazos en bolsas de consorcio y una valija, luego el torso y por último la cabeza. Además de las huellas dactilares, las partes tenían varios tatuajes que ayudaron a saber quién era luego de cotejar imágenes en redes sociales.
La investigación, que quedó en manos del fiscal Marcelo Domínguez, de la UFI Nº 5 de Lomas de Zamora, se centró en la búsqueda de elementos para intentar hallar evidencias de él o los autores del hecho. Las principales hipótesis apuntan a las actividades que el empresario desarrollaba y a las varias denuncias públicas que tenía en su contra, básicamente por estafas.
Por el momento, la justicia dispuso la aprehensión de una mujer trans que reconoció la valija en donde apareció una parte del cadáver como propia. ¿Eso la vincula al hecho? No necesariamente. Se trata de Nicol Alma Chamorro, tal cual revelaron las fuentes. Ella es familiar de cuatro personas cuyos documentos estaban dentro de la valija en donde aparecieron los restos.
El fiscal, asimismo, solicitó a la Justicia de Garantías la realización de cuatro allanamientos de urgencia, que se realizaron durante la madrugada. En el mencionado domicilio de Ituzaingó, los investigadores recuperaron el pasaporte de Pérez Algaba, una computadora, ropa, dos valijas, un bolso de mano y una constancia de atención médica psiquiátrica por trastornos de ansiedad. No estaba su billetera, su teléfono celular, el DNI ni dinero en efectivo.
Pérez Algaba se mostraba en sus perfiles de redes sociales como un empresario dedicado a operaciones en criptomonedas y a la compra y venta de automóviles de alta gama en el estado de Florida, en la costa Este de Estados Unidos. En la Argentina, en tanto, estaba registrado con un domicilio fiscal en la calle Arias al 2400 de Castelar y en el rubro servicios de la AFIP, donde figuraba en situación 5 de deudor “irrecuperable” por una deuda de más de un millón de pesos a entidades bancarias.