Uno de los testimonios más fuertes y conmocionantes que se pueden tener en televisión. Anoche, en la emisión semanal del programa periodístico Primer Plano, Jorgelina se animó a hablar para contar el padecimiento familiar que atraviesa.
Es que, además del abuso que los profesionales descubrieron y cuya víctima fue su hijo -a manos de su propio padre biológico-, ahora ella y los chicos se consideran desamparos y a merced del destino, ya que padece amenazas y difamaciones a través de las redes sociales.
“Estamos buscándolo intensamente. Hay algunas pistas por ahora nada concreto”, informan las fuentes oficiales de la justicia que tiene a su cargo la pesquisa. “Me contacto todo el tiempo con la DDI de Morón y ellos están trabajando en el tema, pero la realidad es que no aparece. Queremos que si alguien lo ve avise de inmediato a las autoridades”, dice Jorgelina, que va sola por la vida junto a sus dos pequeños hijos.
EL TESTIMONIO DE JORGELINA EN PRIMER PLANO:
La historia del abusador Juan Facundo Balletti y las vejaciones a las que sometió al niño, que actualmente tiene diez años, fueron reveladas en un artículo de Primer Plano Online el pasado 1 de mayo. La nota tuvo tal repercusión que se convirtió en la más leída en un mismo día. Estalló en redes sociales y el caso se viralizó.
A raíz de la difusión del caso, el prófugo fue echado de su trabajo en la Universidad Nacional del Oeste, donde era un trabajador no docente desde el 14 de junio de 2013 y cumplía tareas administrativas en la Secretaría de Bienestar y Extensión Universitaria. “Se ausentó desde el día 25 de abril del corriente año sin avisar ni justificar el motivo de las inasistencias”, justificó su decisión la casa de estudios.
LA HISTORIA QUE REVELÓ PRIMER PLANO ONLINE:
“Hemos trabajado mucho a nivel familiar y este señor tendría que estar preso, pero no es así”, lamentó Jorgelina. De frente a la pantalla, su abogado Adrián Corbella detalló que es “una picardía” que Balletti continúe evadiendo la acción de la justicia. “Se les escapó de las manos un par de veces. El corolario de la investigación era su detención”, describió.
Jorgelina también tuvo tiempo de mostrar el lado humano de una madre que tiene dentro suyo el temor por lo que pueda hacer ese monstruo con el que convivió durante once años, pero sabe que no puede caerse porque su hijo la necesita para seguir saliendo adelante después de la aberración padecida. “Un poco de culpa se siente de no haber visto ciertas situaciones”, reflexiona.
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http://www.primerplanoonline.com.ar/index.php/2019/05/29/echaron-la-universidad-nacional-del-oeste-al-acusado-abusar-hijo-menor-edad-sigue-profugo/
“Uno aprende mucho de esto y, la realidad, es que tenemos que estar más atentos como adultos. No sólo a las conductas que los chicos manifiestan sino porque uno cree que el depredador está afuera y muchas veces puede estar adentro de casa”, concluyó.