No hay mucho por decir, casi nada por escribir y sí mucho por llorar. Murió Cristofer Bascoff, el bebé de un año y tres meses que estuvo internado casi desde su nacimiento en el Hospital Sor María Ludovica, de La Plata, y luego fue trasladado al Instituto Médico Agüero, en Morón. Allí Primer Plano Online conoció su historia, e hizo de nexo con las autoridades para que pueda ser llevado a un establecimiento de mayor complejidad.
La derivación llegó pero el bebé no aguantó más. En la noche que va del domingo para el lunes, sufrió cinco paros cardíacos, según describió su papá Steven. Del último no lo pudieron sacar, pese a insistir durante más de media hora. “Él decidió decir basta de pinchazos, de todo. Veía el dolor que sentíamos nosotros y no quiso volver. Nos toca sufrir su pérdida y es muy difícil, pero luchó hasta el final”, contó un padre abatido.
“Se nos fue un guerrero. Quiso volar porque ya no aguantó vernos sufrir tanto”, siguió Steven, quien le pidió al cronista de este medio que se lo recuerde con las palabras más sentidas que se puedan adjudicar. En sus palabras, el papá agradeció cada una de las palabras, oraciones y apoyo que le brindaron en este tiempo. “No hay peor dolor que este”, cerró.
Cristofer había nacido el 7 de marzo de 2019 en la localidad de Belén de Escobar con un síndrome conocido como de intestino corto. A los pocos días padeció lo que se conoce como enterocolitis necrotizante con intestino perforado. Fue derivado, con riesgo de vida, el 3 de abril del año pasado hacia el hospital Sor María Ludovica, de La Plata, en donde permaneció un año internado.
Luego de siete operaciones para reconstruir su intestino, cuando el cuadro del niño estaba estabilizado y empezaban a pensar en la internación domiciliaria, fue llevado a la clínica Agüero, de Morón, como un camino intermedio, pero allí si estado empeoró. Llegó a estar dos semanas internado en el Sanatorio Güemes, en Capital Federal, pero ya era tarde.