La salud pública no es una empresa. El Estado tampoco. La enorme cantidad de despidos que se suceden en los últimos meses en el Hospital Posadas desatan una turbulencia interna en el nosocomio que pone en pie de guerra no sólo a los gremios sino también a los pacientes, que hacen saber sus quejas por la falta de atención o las postergaciones de cirugías programadas para esta fecha. Sin ir más lejos, ayer fueron varios los padres y madres que se retiraron del establecimiento sin la respectiva consulta evacuada. Y que tampoco encontraron interlocutores con los que hablar.
Lo que una vez más dejó expuesta la grieta interna dentro del nosocomio fue la reacción de los gremios. ATE Morón, por ejemplo, cuestionó la renuncia del equipo médico de Cirugía Cardiovascular Infantil, y apuntó sus dardos hacia la figura de Christian Kreutzer, hasta ayer jefe del área, quien presentó su renuncia por no aceptar que parte de sus colaboradores hayan sido despedidos.
“Si el concepto de renuncia, tal como la entendemos, significa resignarse a algo de manera voluntaria, cualquiera sea el motivo, no puede menos que causar sorpresa, como en este caso, cuando un equipo de profesionales que en protesta de una decisión llámese arbitraria o injusta, decide renunciar en forma corporativa”, expresó el sindicato conducido por Darío Silva a través de un comunicado enviado a la redacción de Primer Plano Online.
“Los que no somos profesionales hemos atravesado por situaciones semejantes, y de ningún modo hemos propiciado la renuncia en masa de nuestros compañeros. Por el contrario, la defensa de un trabajador, requiere empaparse de lo que ocurre, establecer canales de comunicación con las autoridades, y discutir los hechos con responsabilidad”, ahonda el texto, que concluye: “Es necesario dejar atrás los egos y reflexionar seriamente acerca del compromiso con la salud pública y la comunidad. El Hospital Posadas, lo hacemos funcionar entre todos y la discusión favorable o no, forma parte de ese funcionamiento. Por eso no renunciamos”.
En una vereda completamente opuesta, la Asociación de Médicos de la República Argentina salió directamente a repudiar “el vaciamiento del Hospital Posadas”, y consideró que “una vez más nos vemos en las puertas de lo que puede ser un desastre sanitario a nivel nacional”, que incluso “puede traer como consecuencia el cierre del hospital nacional más grande de nuestro país”.
El mensaje de la organización que nuclea a los profesionales de la salud expone que, según su mirada, “las constantes decisiones desacertadas de este gobierno siguen poniendo en peligro a los sectores más sensibles de nuestra sociedad”. “Ya no alcanza con atentar contra la educación, contra el trabajo, contra el bolsillo de la gente con una inflación galopante. No alcanza con atentar contra la dignidad de quienes ya no llegan a fin de mes por tener que pagar exorbitantes facturas de luz y gas. Hace mucho tiempo también van por la salud y la situación se agrava cada vez más”, señalaron.
Para finalizar, aseguraron que “desde AMRA repudiamos enérgicamente la decisión de seguir vaciando el Posadas y seguir cerrando servicios”. “Basta de despidos en el Hospital Posadas. Los médicos y los pacientes no son la variable de ajuste”, concluyeron.