Un nuevo frente de conflicto laboral se abrió en la región oeste, en el marco de una situación de crisis que atraviesan muchas empresas de la zona. En este caso lo protagoniza la histórica firma IMSA, con sede en Merlo y dedicada a la fabricación de cables, que decidió echar a trabajadores por la falta de producción.
Ocurre que, desde hace varios años, la empresa es proveedora de obra pública pero en los últimos tiempos se presentó a licitaciones a participar pero no consiguió ganar adjudicaciones. Por eso, sus autoridades avisaron que en el caso de no variar esta situación terminarán echando a cerca de 20 empleados más.
Sergio Souto, secretario general Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Morón y de la CGT regional oeste se presentó ésta mañana en la sede de la fábrica para solidarizarse con los trabajadores y participó del acampe que realizan en el lugar. El dirigente sindical reclama la reincorporación de los despedidos.
Souto avisó, en diálogo con Primer Plano On Line, que si mañana no tienen respuestas de la empresa exigirá la intervención del Ministerio de Trabajo. Y aclaró que, hasta el momento, la acción gremial de protesta se limita a un acampe pero sin retención de tareas ni paro de actividades.









