En un fallo contundente y que ratifica lo actuado por la justicia de Morón, el Tribunal de Casación Penal bonaerense confirmó la condena a 17 años de cárcel contra una docente de nivel inicial y un profesor de música por haber abusado sexualmente de al menos dos niñas de cuatro años de edad en el Jardín de Infantes Nº 901, ubicado en Pueyrredón y Quintana de San Antonio de Padua, en Merlo.
Como informó Primer Plano Online en su momento, las sentencias recayeron sobre Silvana Cecilia Paramidani (maestra de sala de 4) y Néstor Gastón Salas, docente de música, quienes a través de la abogada Patricia Perelló habían apelado al tribunal de alzada el veredicto emitido en mayo de 2019 por los jueces Mariela Moralejo Rivera, Diego Bonnano y Juan Carlos Uboldi, del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 3 de Morón.
Esos magistrados dieron por probado que ambos docentes fueron autores penalmente responsables de los delitos de abuso sexual agravado por el acceso carnal, por las circunstancias de su realización configuró un sometimiento gravemente ultrajante para la víctima y por ser los autores encargados de la educación de la víctima, reiterados en concurso real entre sí, los que concurren en forma ideal con el delito de corrupción de menores agravada por ser los autores encargados de la educación de las víctimas.
Ahora los jueces Víctor Violini y Ricardo Maidana, como integrantes de la Sala V de Casación, rechazaron los planteos de las defensas de los imputados y confirmaron las severas condenas. «Ninguna de las críticas recursivas demuestra absurdo ni arbitrariedad en la fundamentación de la materialidad ilícita y la autoría, sino antes bien sólo reflejan una interpretación parcial y fragmentada de la prueba, más favorable a sus intereses», destacó en su voto el juez Violini.
«El descargo de los imputados, así como la prueba testimonial en que apoyan su tesis exculpatoria, fueron correctamente descartados por el sentenciante, en tanto sólo importan una negación lisa y llana de la acusación, más no controvierten las graves y contundentes pruebas que de manera directa los incriminan», sentenció, en un voto que contó con la adhesión de su colega Maidana. De esta forma quedó firme la condena a 17 años contra los imputados.
“Esto no solo trae alivio, paz y tranquilidad. También trae libertad: tenemos la libertad de poder seguir con nuestras vidas, sin dejar de lado lo que aún falta. Por ejemplo, falta el proceso a la directora del jardín, en ese momento Silvia Morato, quien quedó procesada por falso testimonio y se investiga la complicidad, encubrimiento, participación o si es coautora de los delitos ya mencionados”, reflexionó en diálogo con Primer Plano Online M., mamá de una de las víctimas de los abusos.
La mujer tuvo palabras de aliento para que las familias se animen a denunciar cuando evidencias comportamientos de sus hijos o hijas que no son los habituales. “Si bien hemos pasado mucho en todos estos años quiero alentar a las familias a confiar en la justicia. Soportar el proceso no es fácil, como tampoco fue fácil escuchar el relato de nuestra hija. Pero confiamos y la justicia respondió, estamos muy agradecidos por ello”, contó.
Sobre el final de la charla, de todos modos, M. se preguntó “¿quién paga los honorarios de los abogados que intervienen en la causa?”. Se refiere no sólo a los condenados sino también a la directora, que en este caso cuenta con el patrocinio del mediático letrado Fernando Burlando, mientras que la apelación de Paramidani y Salas llevó la firma de Perelló. “Los abusos existieron, lo sabemos y quedó demostrado. Luchar por la verdad de un hijo siempre vale la pena”, concluyó la mujer.