Después de más de seis meses de arduo trabajo de parte de la nueva comisión directiva del club Defensores de Hurlingham los cambios en las diferentes instalaciones son evidentes. Por caso, a comienzos de 2018 nuevamente vaciaron la pileta de invierno para seguir reseteándola a nueva, con la finalidad de quitarle todo el sarro que tenían sus paredes desde hace tiempo. Asimismo, repararon la caldera y el espacio que la contiene y viejo bufet quedaron como recién inaugurados.
La nueva comisión directiva, que asumió en noviembre del 2016, reacondicionó también las instalaciones anexas. Estaban inundadas, los techos sostenidos por parantes para que no se derrumbaran, y tuvieron que tapar filtraciones y la estructura superior con parrillas de hierro.
“En estos 15 meses desde que asumimos tuvimos que trabajar duro y sacar créditos, que estamos pagando, para reconstruir el club edilicia y socialmente, ya que los socios demandan un club que esté en buenas condiciones”, detalló a Primer Plano On Line Jorge Reymundi, presidente de la entidad deportiva. “El club se está modernizando y seguimos reparándolo. Nuestro primer objetivo fue y es atraer al socio y a la familia, y eso se va a dar en la medida en que ellos puedan observar que hay una conducción transparente y honesta”, agregó.

Como informó éste medio hace algunas semanas, el Municipio le ofreció a Defensores de Hurlingham volver a ser local después de más de muchísimos años en las nuevas canchas del Polideportivo, que fueron reacondicionadas luego del convenio con River Plate. “Con esa noticia, la gran mayoría de los muchachos que están jugando al fútbol en nuestro club se hicieron socios. Nuestro equipo de primera tenía sólo cuatro asociados en el plantel, y ahora tenemos dentro del equipo unos veinte”, acota Jorge Allievi, uno de los vicepresidentes de la institución.
Como en la política, la propuesta que propondrán en el corto plazo a los socios es una modificación estaturaria que obligue a renovar caras en la conducción luego de dos mandatos. “Nosotros tenemos más de sesenta años y no vinimos con la intención de eternizarnos en el cargo, por eso en mayo vamos a convocar una reunión extraordinaria para modificar el estatuto, y uno de los principales puntos es que desde ahora se prohíben las conducciones indefinidas, dos períodos y afuera”, explica el vice.

Para finalizar, más allá de las mieles del momento, la preocupación de las autoridades de ‘Defe’ está puesta en las tarifas que deben enfrentar para mantener con vida las actividades del club. “Hay una ley que indica que la Secretaría de Deportes de la Nación te tiene que reintegrar el 40 por ciento de las facturas del club, que suman unos ochenta mil pesos por mes, para lo cual tenés que completar una serie de requisitos muy engorrosos pero nosotros tenemos todo al día. Y te dicen que no hay partida, ahora eso sí, desde esa misma Secretaria salieron subsidios para clubes de barcos, de tenis, canchas de golf, una vergüenza”, señala Raymundi.
Además, en cuanto a la administración, el otro desafío que enfrentan es que hay un ex socio del club llamado Raúl Pap, que es profesor de educación física y marido de una mujer de apellido Recagno, una de las familias fundadoras tanto del club como de la ciudad de Hurlingham, le está entablando un juicio a Defensores por una cifra cercana a los tres millones de pesos por un problema que tuvo con la antigua comisión directiva. “De prosperar esa demanda, porque él invoca que fue empleado del club y eso es falso, seguramente se va a quedar con parte del club. Nosotros hemos recurrido con unos oficios de intermediarios y ahora esperamos que esto se resuelva definitivamente para bien del club y de todos los socios”, cerró el presidente.