La muerte de un hombre en la habitación de su vivienda que se incendió por circunstancias que se desconocían terminó dando paso a una investigación judicial que acaba de determinar la existencia de una viuda negra.
Tras una serie de contradicciones en su relato, la Fiscalía Nº 4 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez solicitó al Juzgado de Garantías interviniente la detención de H.G.B., de 34 años, acusada por el delito de homicidio agravado por el vínculo.
Fuentes policiales y judiciales informaron a Primer Plano Online que el hecho, que luego se descubrió fue intencional, había pasado inicialmente como un incendio accidental. Ocurrió en una finca ubicada en Ruta 25 y Estrada, de la localidad de Cuartel V, en Moreno. Luego de que los vecinos llamaran al 911, tanto la Policía como los Bomberos acudieron al lugar.
Después de apagar las llamar, los servidores públicos hallaron el cuerpo sin vida de Eloy Tapia Rosales, ocupante de la casa incendiada. De inmediato la intervención judicial fue por averiguación de causales de muerte. Es más: vecinos de la cuadra hablaban de un incendio de tipo intencional y hasta algunos señalaron a la víctima como el responsable.
Sin embargo, diversos elementos recolectados en la escena del hecho hicieron sospechar a los investigadores que se trataba de algo provocado. Una evidencia fue clave: la puerta de la habitación en la que murió calcinado el hombre tenía un candado puesto del lado exterior. Además, había de ese lado líquidos combustibles.
“Se estableció que la mujer mantenía una relación amorosa con el hombre y que ese día hubo una discusión entre ambos. Ella se aprovechó del estado de embriaguez en el que estaba la víctima, lo encerró y prendió fuego”, precisó un investigador consultado por Primer Plano Online. Además, la detenida incurrió en una serie de contradicciones cuando fue indagada respecto de lo que estaba haciendo al momento del siniestro.
H.G.B. fue arrestada por efectivos de la DDI Moreno-General Rodríguez en una vivienda de la calle Armonía al 2000, de González Catán, en La Matanza, y puesta a disposición de la justicia. En su poder los investigadores incautaron el celular de ella para su análisis.