Un oficial de la Policía de la Ciudad fue herido de dos disparos de arma de fuego al ser interceptado por motochorros sobre la Ruta 1003 en la localidad de Libertad, Merlo, en la curva que da a la parte trasera del cementerio Santa Mónica.
La víctima, identificada como Brian Alexis Castro, circulaba en su moto particular (una Honda CG Titán 150) uniformado y rumbo a tomar servicio en la División Barrio 31/31 Bis. En esas circunstancias fue emboscado por los agresores y, al intentar resistir, recibió disparos en la mano y omóplato derechos.
Los delincuentes alcanzaron a sustraerle el rodado, su arma reglamentaria y la documentación personal del policía. Además, una mochila en la que tenía dos cargadores con 16 cartuchos cada uno.
El oficial, herido y ensangrentado, se trasladó como pudo hasta su casa, ubicada a diez cuadras del ataque, y fue llevado por sus familiares de urgencia al Sanatorio del Oeste, en Ituzaingó.
Fuentes de la Policía de la Ciudad informaron a Primer Plano Online que en ese centro asistencial el agente “fue evaluado para un eventual ingreso a quirófano”, y que los médicos constataron que “su vida no corre peligro”.
El caso es investigado por la fiscal Valeria Courtade, de la UFI Nº 3 de Morón, que dispuso que sea la DDI la que se ponga al frente de la pesquisa para dar con los asaltantes.
Otro policía fue víctima del robo de su arma en Merlo y terminó baleado
Otro efectivo policial fue también emboscado y le robaron el arma reglamentaria en Merlo el pasado 20 de julio. Ocurrió sobre Ruta 7, a metros del río Reconquista, por donde el sargento perteneciente a la comisaría 1ª de Hurlingham transitaba a bordo de su rodado, una Bajaj Rouser, y fue interceptado por los dos malvivientes, que lo balearon en la pierna en medio del asalto.
Por el caso hay dos detenidos. Se trata de dos sujetos de 29 y 30 años, a los que identificaron luego de un exhaustivo seguimiento de cámaras de seguridad tras el ataque. También recuperaron la pistola de la víctima y secuestraron la moto usada para emboscarlo, que estaba increíblemente a nombre de uno de ellos.
Los sindicados como autores del hecho fueron identificados por fuentes policiales y judiciales como Ezequiel Arizaga (30) y Emanuel Villalba Malgeri (29). El primero de ellos fue aprehendido al día siguiente del sangriento episodio, mientras que el restante, pese a que ya se sabía quién era por un rasgo distintivo de su físico se había fugado de los lugares que solía frecuentar.
