La justicia y la Policía investigan por estas horas un extraño crimen en Merlo. No hay ninguna hipótesis descartada en torno al hecho, aunque la que mayor fuerza cobró es la de un posible ajuste de cuentas. Ocurrió en una vivienda de la calle Urdaneta al 1.600, entre Olleros y Zabaleta, de la localidad de Libertad.
Según la reconstrucción del caso realizada por Primer Plano Online con fuentes judiciales y policiales, todo sucedió minutos después de que un Peugeot 504 negro -que está siendo rastreado por cámaras de seguridad- frenara en cercanías de la finca en la que se cometió el crimen. De allí bajaron primero un sujeto, luego un segundo y por último al menos un tercero quedó al volante del rodado. Por lo tanto, la banda tiene como mínimo tres integrantes.
La víctima fue identificada como Raúl Orlando Pérez (55), y los voceros de la investigación revelaron que mantuvo un fuerte entredicho con los dos criminales que lo abordaron mientras dormía. Así lo contó un vecino del inquilinato en el que vivía el hombre asesinado. Según su relato fue otro habitante del lugar quien lo cargó en el auto de urgencia y lo trasladó al hospital Eva Perón, donde murió a poco de ingresar.
“Presentaba heridas de arma de fuego en el abdomen, con orificios de entrada y de salida, y otra en muslo izquierdo. Se le hicieron maniobras de reanimación pero fueron en vano, porque falleció en el quirófano”, detalló otra fuente de la investigación. En el lugar del hecho la Policía Científica incautó cuatro vainas de calibre .9 milímetros, un hierro, un machete y el celular del hombre asesinado para peritar.
“Hay cámaras de seguridad en la propiedad en la que lo mataron. Se incautó el DVR y se espera poder revisar las imágenes para intentar identificar a los agresores”, completaron los voceros consultados. Lo cierto es que el caso está en manos del fiscal Hugo Ravizzini, de la Fiscalía Nº 7 de Morón, que ordenó una serie de medidas para dar con los malvivientes.
