Conmoción en Ramos Mejía por otro hecho delictivo que enluta a la ciudad. Un joven de 36 años fue asesinado de un balazo en el abdomen y la Policía investiga qué fue lo que ocurrió. El hecho sucedió mientras el muchacho estaba con su novia en la conocida como Plaza Bomberitos, en Pueyrredón y General Acha. Su pareja fue testigo de la sangrienta situación.
Fuentes policiales informaron a Primer Plano Online que la víctima fatal fue identificada como Daniel Alejandro Fredes (36) quien se encontraba en compañía de su novia, Mariana Sinibaldi (32) en el citado espacio público. Siempre según las primeras versiones de un hecho que está en plena investigación, la pareja estaba sobre la calle Pueyrredón cuando un sujeto, que bajó de un Renault Clío color champagne, le disparó al hombre.
Las primeras versiones de anoche, incluso con la propia información brindada por fuentes policiales, hablaban de un intento de robo al que la víctima se resistió. “Le intentó robar al joven, que se resistió y el atacante le disparó a la altura del abdomen”, precisó un investigador consultado por Primer Plano Online.
Sin embargo, con el correr de las horas otra hipótesis tomó fuerza, y tiene que ver con un encuentro entre víctima y victimario, quienes se conocían. Quien introdujo esa versión en sede policial fue la propia pareja del asesinado: ante el fiscal interviniente en la causa la chica, luego de entrar en contradicciones, reconoció que no fue un intento de robo sino un encuentro pactado previamente.
“En el trascurso de la tarde del domingo su novio mantuvo una comunicación telefónica con un sujeto al que conoce como ‘Negro’, y coordinaron el encuentro en la plaza. Ese sujeto bajó del auto mencionado, y luego de mantener una discusión con Fredes extrajo de sus prendas un arma de fuego con el que le efectuó un disparo para luego darse a la fuga”, detalló un vocero del caso.
Según reveló la mujer, cuando brindó sus explicaciones ante la patrulla que llegó al lugar y habló de un intento de robo eso se debió al “nerviosismo” por ver a su novio agonizando y al “solo efecto de que no se demorara el traslado del fallecido a algún centro médico para su pronta atención”. Efectivamente, el muchacho fue trasladado al hospital Güemes, de Haedo, donde finalmente falleció.
Los motivos de ese encuentro pactado y lo que derivó en la discusión están en investigación, aunque todo indica que podría haberse organizado para la adquisición de estupefacientes para consumo personal de parte de la víctima. Interviene en el caso la Fiscalía Temática de Homicidios de La Matanza.