El peor final: la enfermera Elizabeth Di Legge, que estaba siendo buscada de manera desesperada desde el pasado viernes 29 de julio, fue hallada sin vida en su propia casa de González Catán. La Policía y la justicia trabajan en estos momentos en el lugar para intentar establecer si se trató de un femicidio.
El aberrante hallazgo se produjo esta mañana en la vivienda de la calle José León Larre 10, casi esquina Conde, de la mencionada localidad de La Matanza. La mujer, trabajadora del hospital Churruca, estaba recostada sobre una butaca y tenía “una sonda colocada y una aguja de jeringa en su brazo”, detalló un investigador.
El fiscal Matías Folino, de la UFI Temática Homicidios de La Matanza, trabaja en el lugar para supervisar el levantamiento de pruebas de parte de los equipos especiales. La gran duda que a develar es cómo el marido de la enfermera, Silvio Espíndola (44) puedo haber armado semejante cadena de búsqueda en redes sociales y medios de comunicación sin siquiera haber revisado su casa. ¿O se trató de un femicidio?