Otra vez un chofer de colectivos fue víctima de una terrible agresión durante el desarrollo de su trabajo profesional. En esta ocasión, la víctima fue un conductor del ramal 269 de la empresa 216, y el hecho determinó que el gremio anuncie una medida de fuerza por lo que no circularon los ramales 269, 395, 441 y 166, hasta recibir garantías de las fuerzas de seguridad para los recorridos que realizan.
Según pudo establecer Primer Plano On Line, tres jóvenes subieron al colectivo en la intersección de Arias y Rodríguez Peña, en Castelar. Pero no tenían ni tarjeta SUBE ni intenciones de pagar el boleto respectivo. Cuando el colectivero manifestó su negativa a trasladarlos si no abonaban el viaje, los malvivientes comenzaron a agredirlo salvajemente, a punto tal que debió ser internado en el Hospital de Morón.
“Es un trabajador de conducta intachable y lo estamos acompañando en la recuperación y poniendo a disposición todo lo que él y la familia necesite”, informaron a Primer Plano On Line desde la Línea 216.
El hecho se enmarca en el debate a propósito de la inversión en cámaras de seguridad que el Gobierno provincial exige a las empresas que realicen, según una reciente ley votada en la Legislatura bonaerense. Las compañías, según reflejó Primer Plano On Line hace algunas semanas, manifiestan su acuerdo con la medida pero aseguran que no están en condiciones presupuestarias ni económicas de llevar a cabo esa inversión.
